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Mostrando entradas de agosto, 2016

SUPERVISIÒN

Espero le sorprenda lo que va a leer... Estamos viviendo bajo la supervisión de Dios. Así de simple. Dice la Escritura que ni una hoja cae al suelo sin que el Señor lo sepa. Que ni un pajarito deja de vivir sin que Èl lo autorice... ¿Que le parece esto? ¿Ya había pensado en esto? ¿Que su vida y la mía están siendo supervisadas por el Creador del Universo? Casi seguro que no... Porque se nos ha enseñado que Dios se ocupa de otras cosas: de como salvar pecadores. De como advertir del infierno a los que andan en las cantinas y prostíbulos y otras cosas... Pero, ¿qué de nosotros los que ya le conocemos? ¡Ah! eso es otra cosa, pastor Berges. Eso es otra cosa... Nuestros nombres ya están inscritos en el Libro de la Vida y pronto, cuando venga el Armagedòn nos iremos a cantar coritos con los ángeles en el cielo... Pero... ¿Mientras tanto que? ¿Estamos a la deriva? Buena pregunta, ¿verdad...? Seguramente usted piensa que Dios esta ocupado en asuntos importantes.  Cuando se trata de dif

IMAGEN

Bueno, vamos a platicar de algo que casi nadie se ha ocupado de discernir... La mayoría de pastores, líderes y predicadores del Evangelio nos hablan del pecado. Nos hablan de lo malo que somos, que somos unos fracasados, ingratos, cucarachas y muchas cosas más, que por eso necesitamos a Jesus para que nos arregle todas las líneas de nuestra vida que se han torcido... Y es cierto. No estoy hablando herejías. Cuando llegamos a Jesus llegamos con un montón de cosas feas. Unas más y otras menos, pero todas feas al fin y al cabo... Èl tiene la inmensa bondad de lavarnos con su Sangre derramada en la Cruz, nos limpia, nos hace aceptos ante el Padre y... ¿Y que? ¿Que sigue? ¿Seguimos siendo cucarachas?  ¿Seguimos estando sucios y feos ante el Padre? Ahora somos hijos de Dios. Somos imagen de Èl. Hemos regresado al hogar. Hemos vuelto nuestros corazones aún destrozados por el pecado hacia las Manos amorosas del Padre Celestial... Entonces, la pregunta se repite... ¿Como nos ve el Padre? Es

GETSEMANÌ

Hay lugares en donde se libran batallas dolorosas. Hay lugares en donde se pelean batallas que nos desgarran el alma y nos dejan en pedazos el corazón... Hay lugares en donde nuestros sueños son bombardeados con los cañones del infierno y nos los destrozan de un solo tajo. Hay lugares en donde nuestras batallas parece que están perdidas antes aún de empezar... Esos lugares son los más oscuros de nuestras vidas. Son los momentos en los que no vemos la luz al final del túnel, en donde la noche carece de estrellas y el horizonte se hace más y más lejano... Son esos momentos en los que nos sentimos tan solos aunque estemos rodeados de gente. De gente como nosotros. Hundidos hasta el cuello de soledad e infortunio... Son los momentos oscuros porque las deudas nos ahogan, la enfermedad nos amenaza, el dolor no nos abandona, el sueño nos es negado, el hambre se disipa, el frío cala hasta los huesos y el amor se enfría... Los brazos que antes nos daban calor ya no están, y si están no se

ÈL SABE...

Mat. 26:41 "Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil." Escribí hace poco que no podemos vencer nuestras debilidades a menos que haya Alguien más poderoso que nosotros para poder hacerlo. Eso explica por qué antes de conocer a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador andábamos en tinieblas, llenos de delitos y pecados. Derrotados por las tentaciones, dando tumbos y siendo marionetas en las manos de Satanàs que nos hundía más y más en el fango y el lodazal de la vida... Por eso nos debiera ser difícil juzgar a aquellos que no conocen la Verdad. Jesucristo es la Verdad. Al no conocerlo a Èl están en su verdad. Y la verdad del hombre es la mentira que nos llevaba a la derrota una y otra vez... Jesus, como hombre, como el carpintero que había sido, antes de ser Glorificado por el Padre, sufrió todo lo que nosotros sufrimos. Su humanidad rogó ser librada de lo que en su divinidad podía prever.  Jesus, el carpintero implor

IMPOTENCIA

No podemos hacer nada por nosotros mismos. Esto es un golpe muy duro al orgullo humano. A la prepotencia y a la autosuficiencia... Pero si somos honestos ante nosotros mismos sabemos que los cambios que necesitamos hacer en nuestra vida tienen que ser hechos por alguien más poderoso que nuestra voluntad o nuestros deseos... Reconozcamos que somos impotentes ante la tentación... ¿Ha logrado usted cambiar un rasgo de su carácter por sí misma, hermana?  Hermano querido, ¿Ha logrado usted dejar de ver a otras mujeres en la calle solo porque lo ha decidido así? O, que tal esta otra situación: ¿Ya no le gustan los chismes, aunque sea en el parqueo de la iglesia después del culto? O, algo más profundo: ¿Ya no tiene pensamientos pecaminosos que le traen vergüenza y humillación porque usted sabe que está dialogando con los espíritus malignos que le hacen tener pensamientos de mal?¿Ya no tiene pensamientos negativos cuando pelea con su pareja? Seamos francos: No podemos dejar esas cosas senc

EL CUERPO

" Respondiendo el Rey, les dirá: "En verdad os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos hermanos míos, aun a los más pequeños, a mí lo hicisteis." Mat. 25:40 ¿Por qué Jesus dijo que lo que le hacemos a uno de nuestros hermanos se lo hacemos a Èl? Para responder esta pregunta es necesario ver lo que le sucedió a Saulo de Tarso... Imagine la angustia de Saulo cuando Cristo lo enfrentó cerca de Damasco con una realidad dolorosa.  El Señor le dijo Saulo: "Yo soy Jesus, a quien tú persigues". Saulo había pensado que estaba tratando simplemente con personas haciendo el trabajo de Dios para erradicar a los herejes judìos. Saulo fue sacudido con esta verdad: Jesus tiene un cuerpo espiritual.  Èl es la cabeza del cuerpo, es decir, nosotros, sus hijos, estamos conectados a la cabeza. Es un solo cuerpo, formado por los creyentes que son carne de su carne y cualquier persona que esté contra uno de ellos está en realidad contra él... Sabiendo esta verdad, podemo

DESPEDIDA

Ayùdeme con este escrito utilizando su imaginación... Imagínense que están despidiendo a un ser querido en el Aeropuerto. Se va lejos, a otro paìs y tardará un buen tiempo para volver a verse... ¿Què le dirìa como despedida? Cuesta imaginar las palabras que se deben decir, ¿verdad?  Las despedidas siempre son misteriosas  y dolorosas. Son momentos difíciles de imaginar y se llevan a cabo hasta que uno está en esa disyuntiva... O ¿que tal unos últimos minutos con la persona que está agonizando? Una última visita a su padre enfermo en otro pueblo. ¿Qué se dice? ¿Qué se hace? ¿Qué palabras se eligen? Jesus pasó por esos momentos... Y Èl escogió la oración... Léanla: "Mas no ruego sólo por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos, para que todos sean uno. Como tú, oh Padre, estás en mí y yo en ti, que también ellos estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste." Juan 17:20-21 Observe algo: En esta oración Jesus ora por us

SINGULARES

Entre mis cosas guardo algunas mancuernillas que uso cuando me pongo ropa de vestir. Algunas son caras y otras baratas, pero todas tienen un valor intrínseco muy especial. Algunas las he comprado yo y otras me las han regalado. Todas me gustan y las voy rotando a medida que pasa el año... Pero entre todas mis cosas, hay un regalo que tiene un valor muy pero muy especial. No tiene precio, tiene valor. Y es muy especial porque fue mandado a hacer especialmente para mí. No estaba en una vitrina al mejor postor. No fue hecho en serie. Quien me lo mandó hacer fue una mujer muy grande en amor, en atención y en esmero. Se ocupó de que se hiciera a mi medida, a mi gusto y además de todo, le mando poner mis iniciales para hacerme saber que fue hecho exclusivamente para mí. No puedo regalarlo porque habría que dañarlo al quitarle mis iniciales. Es una esclava de oro. Me la regaló mi mamá. Es el único recuerdo que tengo de ella además de los recuerdos emocionales por supuesto. Esa esclava es

¿SABEN QUE...?

"Me sacó a lugar espacioso; Me libró, porque se agradó de mí." Sal. 18:19 RV60 A veces creemos las mentiras de nuestro orgullo... Cuando vemos a otros cristianos que no viven el Evangelio como creemos que se debe vivir los criticamos, los hacemos a un lado y nos catalogamos como que nosotros sí estamos en el verdadero Camino... Pero Gloria al Señor que El ve el corazón y no los detalles... Aunque, claro, los detalles cuentan, pero realmente lo que para El es importante es lo que hay dentro de nosotros. Por eso, con mucha pena debo decir que muchos de nosotros quizá no estemos amando al Señor como El lo merece... ¿Y pensamos que Èl nos salvó a causa de nuestra decencia? ¿Pensamos que nos salvó por nuestras buenas obras o buena actitud o por lo bien parecidos que somos?  ¿Será que nos salvó porque cantamos bien, o entornamos los ojos al orar? lo siento.  Si tal fuera el caso, nuestra salvación se perdería al opacarse nuestra voz, o cuando nuestras obras pierdan su brillo.

NOMBRES

Acabo de aprender algo muy hermoso. Hermoso para mí, y espero que usted descubran su propio dato... Me acabo de enterar el significado del nombre hebreo de Israel. Y cuando eso sucedió se me abrió un panorama más extenso del por qué soy lo que soy. Y por qué hago lo que hago. No es que me esté echando flores, pero debo dar testimonio de lo que Dios hizo por mí al darme el nombre que me dio... Las letras hebreas de Israel, cuando se desarman se forma la palabra ShirEl, que significa "Canción a Dios". ¿Qué les parece? ¡Soy una canción a Dios!. Mi vida, mis acciones, mi trabajo, mis escritos... todo debe cantarle a mi Creador porque ese es el significado de mi nombre... Soy hecho para la Alabanza de su Nombre. Ahora lo entiendo. Pablo me lo había dicho pero hasta ahora se me cayo la venda... Ahora bien, ¿no le parece increíble que Dios haya reservado un nombre para usted?  ¿Un nombre que ni siquiera conoce? Porque siempre hemos pensado que conservaremos el nombre que nuest

DESCUBRIENDO...

¿Saben qué...? Acabo de descubrir unas cosas. Son sencillas pero importantes. Son cosas cotidianas pero que se me habían pasado por alto. A causa de la rutina diaria uno va perdiendo la sensibilidad hacia las cosas que están ahí pero no las vemos, como escribí ayer... De mi casa a la Iglesia que tengo el honor de pastorear, sin tráfico hay unos veinte minutos si mucho. Pero con tráfico se pone difícil. He hecho hasta hora y media para llegar. Siempre me atasco y tardo todo ese tiempo observando cosas. Pues bien, uno de esto días que sufrí ese problema una vez más, tuve la dicha de cambiar mi perspectiva de lo que me rodeaba en ese atasco vehicular... Empece a observar a la gente que va en el otro carril. Unos hablando por celular, otros mensajeando aprovechando las paradas, otros recostados sobre el vidrio de su ventanilla con la mirada perdida y muchas acciones más... Pero el milagro que les quiero compartir es que en ese momento que me puse a observar a los que me rodeaban, de

¡ASOMBROSO...!

Hay cosas que las damos por sentado. No nos afectan mucho porque las tenemos allí, porque están allí y porque nos acostumbramos a ellas. Ni fu ni fa, como decimos en Guatemala... Pero hoy quiero darles el valor que tienen en su justa medida. Ya no quiero continuar con la costumbre de no ver lo asombroso que hay detrás de cada gesto, cada sonrisa y cada saludo que la gente me da cuando salgo a caminar en las mañanas... Gentes que no saben mi nombre pero a fuerza de verme todas las mañanas levantan su mano, unos caminando, otros corriendo y me dicen "buenos días"... ¡Asombroso! Ni saben quien soy pero se hermanan conmigo... Pienso que es el Señor quien los invita a decirme que se fijen en mí. Que me vean. Que no soy invisible. ¡Asombroso...! Después de mis ejercicios, me meto al baño y me doy cuenta que puedo bañarme solo. Que no necesito que nadie me pase el estropajo por la espalda. Que puedo rasurarme y secarme el cuerpo con la toalla y arreglarme el pelo yo solo. Que te

CONOCIENDONOS

En una de mis íntimas pláticas con Su Majestad, el Señor Jesucristo, se me vino a la mente una pregunta imaginaria que Èl me hizo... No sé si fue Èl o yo lo imaginé, pero me encontré con este diálogo: ¿Conoces tú a tu esposa? Creo que me preguntó... Y yo le respondí: Sì, creo que la conozco. No bien pero algo sé de ella... ¿Podrías mencionarme algunas cosas que conozcas de ella? Y en mi mente empecé a enumerarle algunas de las cosas que sé de mi esposa después de treinticuatro años de casados... Y, me volvió a preguntar, ¿Qué cosas sabes tú de Mi? Bueno, después de tantos años de conocerte, creo que puedo mencionar algunas, fue mi respuesta... ¿Cuales son...? Bueno, sé que eres excesivamente bueno. Sè que eres el Señor de mi vida, aunque a veces yo tomo el señorío y me va mal... Sè también que eres mi proveedor. Sin tu ayuda yo no tendría ni un centavo en el bolsillo. Eres mi Sanador. Los doctores dicen que tengo una cosa y tú dices que no es cierto y esa es la verdad. El

INGRATITUD

No lo podemos negar: Somos ingratos. Ingratos a más no poder, especialmente con el Señor... Permítame explicarme: Antes de las vacaciones estamos muy ocupados orando, ayunando, haciendo vigilias para poder tener argumentos para decirle al Señor que le hemos buscado, que hemos clamado por su favor pero no para agradarlo a Èl sino para agradarnos a nosotros mismos... Para sentirnos santos. Para hacernos creer que somos espirituales. Y, claro, el Señor, debido a su infinita bondad, nos escucha, no por lo que hacemos sino porque nos ama. Solo por eso. Porque nos ama. Porque quiere mostrarse a nuestras vidas para hacernos volvernos de nuestros malos caminos y tener una verdadera relación de intimidad con Èl... No por lo que nos da sino porque El es Èl... Porque, ¿qué sucede una vez que hemos alcanzado nuestros milagros? ¿Qué sucede cuando ya tenemos los fondos para irnos de vacaciones, para disfrutar de un largo fin de semana en la playa o en compañía de amigos o en alguna reunión s

ETERNIDAD

Vivimos en un mundo ajetreado... Lleno de ocupaciones, lleno de problemas y lleno de sorpresas... Unas agradables y otras desagradables. "Le tengo malas noticias" fue el preámbulo del Doctor que examinó a una de nuestras compañeras de congregación esta semana. Sus palabras resonaron lúgubres. Dio temor escuchar lo que tenía que decir a su paciente el galeno. Todos quedamos en suspenso y pude ver en los ojos de nuestra hermana Nora el miedo, el susto y el debilitamiento de su alma cuando levantó los ojos para escuchar lo que su Doctor le iba a decir... Momentos eternos que quedan grabados en lo más profundo del alma. Palabras lacerantes y tormentosas que es como si un tsunami llegara a la vida de cualquiera de nosotros, arrasando con toda esperanza, con los sueños y los proyectos de tener un momento de felicidad... Pero no todos los momentos eternos son feos. No. Hay esperanza de tener momentos de eternidad deliciosa en esta tierra. Es como una vislumbre del cielo. Es lo q

DECISION - y 3

Decisiones... tan importantes como la vida misma. Hay quienes han decidido obrar contra naturaleza y viven aislados, presos de sus propias decisiones, amargados y en prisiones cuyas llaves se encuentran no en un llavero sino en el alma misma... Personas que han decidido odiar en vez de amar. Rechazar en vez de aceptar. Ver oscuridad en vez de ver el sol... Cada quien tiene lo que se ha labrado en la vida. Nadie puede ni tiene el poder para hacerme cambiar de opinión con respecto a mi comportamiento personal... Nada se gana por la fuerza. Por eso elijo ser manso.  Si levanto mi voz que solo sea en alabanza.  Si cierro mi puño, que sea en oración solamente.  Si hago exigencias, que solo sean a mí mismo... Elijo el dominio propio. Soy un ser espiritual.  Luego de que haya muerto este cuerpo, mi espíritu remontarà el vuelo hacia la eternidad.  Me niego a permitir que lo que se va a podrir gobierne lo eterno.  Elijo el dominio propio. Solo me emborracharé de gozo, de alegría y de co

DECISION -2

Lo prometido es deuda... Ayer escribí acerca de las decisiones que debo tomar cada día... Hoy me reuní con el Señor como acostumbro a hacerlo cada madrugada y continué mi platica con Èl con respecto a lo que debo hacer y preparar para mi nuevo día. Hoy invitè a mi Dios para que sea el Dios de las circunstancias.  Me niego a la tentación de ser cínico, la herramienta del pensador perezoso.  Rehuso considerar a las personas como menos que seres humanos, creados por Dios. Me niego a a ver en los problemas algo menos que una oportunidad de ver a Dios... Hoy elijo la paz... viviré este día perdonando.  Perdonar para que pueda vivir. Elijo la paciencia. Pasar por alto los inconvenientes que me vengan en el camino.  En lugar de maldecir al que ocupa el sitio que me corresponde, lo invitarè para que siga su camino. En vez de quejarme porque la espera es demasiado larga, agradeceré a Dios por un momento para orar.  En lugar de cerrar mi puño ante nuevas tareas, las encararè con gozo y val

DECISION -1

El dia amanece. Todo está en silencio. Es temprano. El café está listo en la cafetera. El cielo aún está negro. El mundo sigue durmiendo. El día se aproxima. El calor de la habitación invita a seguir durmiendo pero he tomado la decisión de dejar las sábanas a cambio de ir a reunirme con quien me da de comer... En pocos momentos llegará el día.  Se acercará rugiendo por las calles al levantarse el sol.  La quietud de la madrugada se cambiará en el ruido del día.  La calma de la soledad se reemplazarà por el golpeteo del paso de la gente que empezará su rutina.  El refugio de las primeras horas de la mañana será invadido por las decisiones que tienen que tomarse y los compromisos que deberán cumplirse... Tendré doce horas para quedar expuesto a las exigencias del día.  Estaré en la mira de dos mundos: Del cielo y del infierno. Debo ser cuidadoso entonces de lo que haga. Ahora es el momento en que debo tomar una decisión.  Porque lo que yo decida en estos momentos de intimidad con mi

FANTASMAS

No podemos negarlo. Vivimos bajo el acoso constante de los fantasmas del pasado. De aquella vez que mentimos sobre algo que nos iba a doler si nos descubrían. Es cierto, éramos muy pequeños para discernir la mentira de la verdad, pero hoy, muchos años después, seguimos recordando ese episodio que quedó flotando como Gasparìn, el fantasma amistoso en nuestros recuerdos... Y quizá, cuando uno de nuestros hijos repite la historia, aparece ese fantasma nada amistoso y nos trae a la memoria lo que hicimos y expresamos la consabida frase: "¡Lo mismos hice yo...!" y bajamos la vista avergonzados... O cuando la hija de quince años le confiesa que se ha enamorado del muchacho equivocado y usted calla porque resulta que el primer beso se lo dio precisamente un muchacho como ese... Música, frases, palabras, episodios, esquinas, aguaceros, sabores y olores nos viven recordando cosas que sucedieron en nuestra niñez o juventud o quizá aún en nuestra vejez... Como resultado, su caminar

AQUEL...

¿Què es lo que nos hace sentir mal cuando estamos o tratamos de estar en la Presencia del Señor? Lo que Èl nos dijo que no hiciéramos... Recordar las cosas pasadas.  Porque eso es precisamente lo que nos separa de su amor. Pablo dice que nada nos separara del Amor de Dios, pero cuando examinamos nuestros pasos, cuando vemos nuestro caminar, cuando sentimos sobre nosotros todo el peso de la culpa por el dichoso pasado que no debiera existir, sentimos que le hemos fallado al Señor y eso nos hace dejar de orar, dejar de buscarlo y dejar de adorarlo... Bien. ¿Es Dios quien se aleja o nosotros? ¿Qué nos separa entonces de su amor? No es Èl, somos nosotros. Nos separa el recuerdo de las cosas que sucedieron y que no podemos olvidar. Hay recuerdos en nuestra mente que han quedado tatuados y es difícil borrarlos. ¿Por qué? Porque el Diablo se encarga de recordarnos las suciedades de nuestra juventud, de nuestras imprudencias y eso hace que la llaga del dolor vuelva a abrirse y nos

RECORDAR

He estado cometiendo un tremendo error al orar al Señor... Lo confieso con mucha pena y vergüenza porque a pesar de todos mis años de cristianismo, ministerio, conocimiento y otro montón de papeles que tengo guardados en algún lugar, no había comprendido algo... Pero empecemos por el principio... En mis oraciones "santas" siempre le decía al Señor: "Señor, tú sabes quien soy. Tù sabes cuantos pecados he cometido y creo que recuerdas la vez pasada que hice esto, lo otro y esto otro... Por favor perdona esas cosas feas que hice en el pasado y permíteme empezar de nuevo..." Debo decir que mis motivos eran puros y mi corazón estaba siendo agradecido con el Señor por perdonarme y olvidar mis caídas y errores... Solo que estaba tan equivocado como creer que la luna es de queso... ¿Cuando lo descubrí? Cuando me di cuenta que estaba usando la palabra "recuerdas". En algún momento de mi confesión me di cuenta que estaba siendo incrédulo ante el Señor. Creyend