¿DONDE ESTÁS, ADÁN...?
Génesis 3:9 nos da una gran enseñanza a todos los cristianos. Según nosotros, somos libres totalmente. Eso ha enseñado la religión. Jesús vino a libertarnos. Por eso somos libres. Ya no estamos obligados a rendirle cuentas a nadie. Ya no tenemos obligaciones con nadie. Ya no debemos sujetarnos a nadie... Pero es un craso error... Jesús nos vino a libertar del yugo del pecado. El vino a libertarnos de la fuerza que el pecado ejercía sobre nosotros. Es decir, nos vino a libertar de un amo pero a partir de ese momento, Él se levanta como nuestro Amo. Es decir, no hay libertad absoluta. Nadie es libre. O usted es esclavo del pecado o es esclavo de Cristo. O usted está esclavizado al pecado y todas sus miserias... o está esclavizado a la Santidad de Dios. No hay opción. No hay camino neutro. No hay zonas grises. O blanco o negro. Caput... Eso fue lo que ignoró Adán. Y se lo llevó la tristeza... como a muchos de nosotros. Por ignorar las Escrituras. Génesis cuenta que Dios hab...