RINDIÉNDOSE

Si hay algo difícil para el hombre, cualquiera que sea su escuela de pensamiento, es dejar que el otro sea mayor. Es muy raro encontrar especímenes humanos dandole el primer lugar a alguien más que no sea él. Excepto Jesús, no conozco a nadie más que lo haya logrado. Se han organizado guerras, ataques, traiciones y todo lo imaginable para demostrar que somos capaces de mantener el control. El ego es más fuerte que cualquier gigante que podamos encontrar en nuestros caminos.

Quizá por eso los Estados Unidos de América proscribieron la Biblia de las escuelas y del Congreso. Porque allí se enseña que hay que poner la otra mejilla. Que hay que darle pan al que maldice. Que hay que caminar la segunda milla... La generación de líderes políticos que tomaron la palestra en los sesenta ya no aceptaron esos principios. El Sermón del Monte estaba bien para los fundadores de la Patria pero no para ellos. Ellos eran la generación de Vietnam. Fueron los herederos de los que empezaron esa gran nación pero no estuvieron dispuestos a regir su código de conducta bajo los principios que sus padres tomaron. Y... movieron los linderos puestos por ellos. Algo prohibido por el Libros de Proverbios. Sin embargo lo hicieron. Y vino el caos. La venganza. El Black Power. Harlem con sus desórdenes. Los Mau Mau con Nicky Cruz a la cabeza. Los Ángeles con sus pandillas. Y así podría seguir con la nefasta historia que pervirtió el derecho. Los gobernantes, como se dice, salieron del "closet" y se mostraron en toda su crudeza en sus adulterios y perversiones sexuales... Las mujeres tomaron su propia iniciativa y nació la Liberación Femenina. Dejaron la casa por salir a trabajar y alcanzar metas que antes solo los hombres tenían. ¿Resultado? Los niños con llave al cuello. Ya no hubo mamás que los recibieran al regresar del colegio. Ahora su mamá era la TV, la pornografía, las armas, lo electrónico. Ya no hubo quien hiciera el almuerzo de legumbres, vegetales y sopa de res con arroz... Ahora empezaron a comer comida chatarra... Y nació el fenómeno de la obesidad americana.

¿Qué pasó?

Demostraron que tenían el poder. Que el que pega primero pega dos veces. Que los pobres tienen que ser comidos por los más ricos... ¿El resultado? ¡Hoy! Escuelas con niños asesinos. Escuelas en donde el que manda es el alumno y no el maestro. Ahora la vara la tienen los niños para darle a los profesores. Y más que varas... ahora llevan pistolas... Y, en el Salvador, cobran la renta a los mismos maestros. O pagan o se van. Así de fácil... ¿Todo por qué? Porque nos alejamos de la Palabra de Dios. En lugar de darle el primer lugar a Dios se lo dimos al "Yo". Los padres dijeron: "aquí mando yo"... las madres dijeron: "aquí mando yo", ahora los hijos dicen... "aquí mando yo". El pecado más grande es que la misma Iglesia de Cristo tiene ese síndrome. Los pastores dicen... "aquí mando yo". Y Jesús se fue de Su Casa...

El verdadero control llega cuando aprendes a dejar ir. Cuando dejas de intentar dirigir el espectáculo, te abres a la claridad y a la visión. Rendirse a Dios puede ser dramático. Puedes, literalmente, caer de rodillas y la Presencia fluye. Tener el verdadero control es controlar mi alma, mis deseos, mis impulsos; no a los demás. Ser victorioso es vencer mis miedos y no provocar miedo.
A veces rendirse es más sutil. Es una sonrisa y el silencio cuando alguien dice algo que tú sabes que es incorrecto, pero en realidad no importa. Rendirse es cuando tomas una decisión de preferir tener paz a tener la razón.