EL NIÑO Y EL VIEJO
Marcos 10:13-14 “Y le traían niños para que los tocara…” “Dejad que los niños vengan a mí…” Ah, lo niños… ¡Quien comprendiera lo que es ser niño…! Jesus se dio cuenta de algo que no le gustó, cuando sus propios discípulos estaban evitando que los niños se acercaran a su Maestro. Jesus los regañó duramente porque ellos, los viejos, no querían permitir que Jesus los tocara. Los “grandes” no querían dejar que los pequeños, los niños, fueran tocados por las santas y preciosas manos de Jesus. ¡Cuánta dureza de corazón! ¡Cuánta indiferencia hacia los niños! Es lo mismo que sucede hoy en día en muchas iglesias “formales”, llenas de adultos, llenas de hombres y mujeres maduros, de tan maduros que ya están duros, sus cáscaras religiosas les han quitado la suavidad del alma, la ternura del corazón y la sensibilidad del espíritu. Jesús les regañó porque los adultos no estaban permitiendo que Jesus tocara el alma inocente y pura de los niños. Ellos...