PERSISTENCIA
Yo creo firmemente en la persistencia... Desde pequeño me enseñaron a permanecer fiel a mis principios, a mis aprendizajes y a mis amistades...
Es una virtud que me inculcaron muy dentro de mí y hasta la fecha trato de mantenerla a pesar de que he sido abandonado por algunas personas que he llegado a querer y apreciar. Sin embargo, en lo que a mí respecta, si debo saludarlos en el Centro Comercial, lo hago sin ningún tapujo... No tengo por qué esconder mi rostro de nadie ni negarles un buen apretón de manos... Aunque se hayan ido.
Así pasa con mi relación con mi pastor Vladimiro Vasquez. Llevamos 35 años de estar en buena relación y espero sigamos otros muchos más. No es perfecto, como buen hombre debe tener sus "cositas" que a mí no me interesa averiguar. Lo que me interesa es mantener mi fidelidad al hombre que Dios puso en mi camino y que me ha guiado, enseñado, pastoreado y regañado algunas veces para mi propio bien...
Y eso es lo que busca Jesus en sus hijos... Lamentablemente muchos no lo conciben así. A la primera mosca que se para en el borde de su copa se arruina su vino. Y no perdonan. Se van y dejan pedazos de corazones heridos y abandonados con el vendaje de sus heridas mostrando la sangre que brota de ellas... Pero así es la vida. Espero que usted que me lee pueda visualizar esto y no darle la espalda a sus amigos aunque ellos lo hagan con usted.
"¿A qué vienes, amigo...?" fue la pregunta que Jesus le hizo a Judas. Amigo. Es la palabra más hermosa que se pueda expresar. En ella hay una profundidad tremenda que es difícil de concebir a menos que se viva. Jesus es el perfecto Amigo de nuestras destrozadas vidas. Aunque lo traicionamos, lo abandonamos y le damos la espalda muchas veces, Èl permanece fiel. Tiene un aguante de persistencia hasta el infinito. Sabe que un día nos vamos a encontrar en el pasillo de algún hospital y Èl estará allí. Sabe que algún día nos encontraremos en una funeraria y Èl estará allí. Sabe que algún día estaremos sentados en una mesa sin un pedazo de pan y Èl estará allí... Como deben estar los amigos. Porque Èl sí sabe lo que es la persistencia. La perseverancia, pues...
De eso se trata el Evangelio de Jesus. Perseverar. Persistir. Permanecer... Eso fue lo que dejó escrito en Mat. 24:13: "Pero el que persevere hasta el fin, ése será salvo". No dijo que si tienes éxito serás salvo. No dijo que si tenías mucho dinero o muchos títulos, o muchos ministerios serias salvo. Tampoco dijo que si eras un triunfador serias salvo. No. Si perseveras. Si permaneces. Si persistes...
En Guatemala tenemos un dicho para los que persisten en alcanzar algo: Se llama "ñeque". Ñeque es una palabra que usamos para aquellos que tienen "garra", "fuerza", "necios" los que no se dan por vencidos. Los que no importa el tamaño de la montaña, la suben aunque dejen media alma en el camino. Los que terminan la universidad a los sesenta años y se gradúan, decimos que tuvo "ñeque". No soltó. Se aferró a su sueño y terminó su carrera...
Eso busca Jesus. Gente de ñeque. Gente de garra. Gente como Caleb que no abandonó su pedazo de tierra en Hebron todo el tiempo que anduvo en el desierto... ¿Tiene usted ñeque para aguantar los sinsabores de la vida y seguir adelante entonces...? Usted está entre los salvos por Jesus... Persista...
Es una virtud que me inculcaron muy dentro de mí y hasta la fecha trato de mantenerla a pesar de que he sido abandonado por algunas personas que he llegado a querer y apreciar. Sin embargo, en lo que a mí respecta, si debo saludarlos en el Centro Comercial, lo hago sin ningún tapujo... No tengo por qué esconder mi rostro de nadie ni negarles un buen apretón de manos... Aunque se hayan ido.
Así pasa con mi relación con mi pastor Vladimiro Vasquez. Llevamos 35 años de estar en buena relación y espero sigamos otros muchos más. No es perfecto, como buen hombre debe tener sus "cositas" que a mí no me interesa averiguar. Lo que me interesa es mantener mi fidelidad al hombre que Dios puso en mi camino y que me ha guiado, enseñado, pastoreado y regañado algunas veces para mi propio bien...
Y eso es lo que busca Jesus en sus hijos... Lamentablemente muchos no lo conciben así. A la primera mosca que se para en el borde de su copa se arruina su vino. Y no perdonan. Se van y dejan pedazos de corazones heridos y abandonados con el vendaje de sus heridas mostrando la sangre que brota de ellas... Pero así es la vida. Espero que usted que me lee pueda visualizar esto y no darle la espalda a sus amigos aunque ellos lo hagan con usted.
"¿A qué vienes, amigo...?" fue la pregunta que Jesus le hizo a Judas. Amigo. Es la palabra más hermosa que se pueda expresar. En ella hay una profundidad tremenda que es difícil de concebir a menos que se viva. Jesus es el perfecto Amigo de nuestras destrozadas vidas. Aunque lo traicionamos, lo abandonamos y le damos la espalda muchas veces, Èl permanece fiel. Tiene un aguante de persistencia hasta el infinito. Sabe que un día nos vamos a encontrar en el pasillo de algún hospital y Èl estará allí. Sabe que algún día nos encontraremos en una funeraria y Èl estará allí. Sabe que algún día estaremos sentados en una mesa sin un pedazo de pan y Èl estará allí... Como deben estar los amigos. Porque Èl sí sabe lo que es la persistencia. La perseverancia, pues...
De eso se trata el Evangelio de Jesus. Perseverar. Persistir. Permanecer... Eso fue lo que dejó escrito en Mat. 24:13: "Pero el que persevere hasta el fin, ése será salvo". No dijo que si tienes éxito serás salvo. No dijo que si tenías mucho dinero o muchos títulos, o muchos ministerios serias salvo. Tampoco dijo que si eras un triunfador serias salvo. No. Si perseveras. Si permaneces. Si persistes...
En Guatemala tenemos un dicho para los que persisten en alcanzar algo: Se llama "ñeque". Ñeque es una palabra que usamos para aquellos que tienen "garra", "fuerza", "necios" los que no se dan por vencidos. Los que no importa el tamaño de la montaña, la suben aunque dejen media alma en el camino. Los que terminan la universidad a los sesenta años y se gradúan, decimos que tuvo "ñeque". No soltó. Se aferró a su sueño y terminó su carrera...
Eso busca Jesus. Gente de ñeque. Gente de garra. Gente como Caleb que no abandonó su pedazo de tierra en Hebron todo el tiempo que anduvo en el desierto... ¿Tiene usted ñeque para aguantar los sinsabores de la vida y seguir adelante entonces...? Usted está entre los salvos por Jesus... Persista...
Comentarios
Publicar un comentario