DESPOJOS


No hay nada más triste que nos despojen de nuestras cosas. Nos enoja. Nos entristece. Nos da temor salir a la calle y subirnos a un bus porque sabemos que alguien acecha en las paradas para seguirnos y despojarnos de lo que es nuestro...

Hay despojadores por doquier. En cualquier lugar a donde usted dirija sus ojos, oculto en las tinieblas de la moral hay alguien con intenciones de despojarnos de algo. De lo que nos pertenece. De la vida incluso...

Desde la niñez hasta la adultez, a todos, hombres y mujeres nos han despojado de algo...

A algunos les han despojado de su dignidad. A otros le han despojado de su entusiasmo por la vida. Llegó el divorcio porque otra persona le despojó de su pareja a la que tanto amaba. Ahora la otra almohada está vacía porque alguien se llevó a otra cama a quien dormía a su lado...A otro lo traicionaron sus amigos. Le despojaron de la paz interior. A un niño lo despojaron de su madre que fue asesinada por el delincuente del pueblo. A la jovencita se le despoja de su dignidad cuando un inconsciente violador encontró la oportunidad de obtener por la fuerza lo que no obtendría por voluntad...

Al pequeño lo despojaron de su padre que tuvo que ir a otro paìs a buscar el pan que no encontró para él en su propia casa... Le despojaron de su calor y su amor paterno.

A los trabajadores se les despoja de su empleo por reclamar sus derechos.  Las preocupaciones diarias le despojan a usted de la paz interior cuando no puede cumplir con sus compromisos financieros mensuales... La pobreza le ha robado a muchos sus valores morales despojándoles de sus virtudes... La familia a sido despojada de sus derechos de ser felices. Todos hemos sido despojados de algo que amábamos o necesitábamos... Se nos ha despojado la confianza de unos en los otros...

Y Satanàs pelea arduamente por despojarnos de algo verdaderamente importante: Quiere despojarnos de Dios.  Quiere que perdamos la fe. Que perdamos la visión de un Dios Omnipresente y que ve todo lo que sucede en esta tierra que Èl creó para que la disfrutáramos.  ¿No cree que es injusto esto? ¿De qué le han despojado a usted? ¿De sus bienes materiales? Le advierto algo: el fin es despojarlo de sus bienes espirituales. Despojarlo de su confianza en Dios...

¿Le han despojado de su salud? ¿de su familia? ¿de su matrimonio? Tranquilo. Dios tiene el control de todo. La buena fama que usted tiene en el cielo por creer en el Señor ha provocado que usted sufra las penalidades de este mundo. Si algo preocupa al infierno es su integridad a Dios.

Pregùntele a Job.

Vea la fama que Job tenía en el cielo: "Y el SEÑOR dijo a Satanás:¿Te has fijado en mi siervo Job? Porque no hay ninguno como él sobre la tierra, hombre intachable y recto, temeroso de Dios y apartado del mal..." Y eso hizo rechinar los dientes al diablo. En consecuencia lo despojó de todos sus bienes materiales. Lo despojó de sus hijos. Lo despojó de su esposa... Pero...

"Entonces Job se levantó, rasgó su manto, se rasuró la cabeza, y postrándose en tierra, adoró..." No pudieron despojarlo de su fe. Se mantuvo tal como creían y esperaban en el Trono de Dios que lo haría. Job no defraudó a Dios el día de su infortunio. Decidamos mantener nuestra integridad pese a los intrincados momentos que Satanàs nos haga pasar. Demostremos que nuestro amor a Dios no está regulado por sus bendiciones, sino que nuestras bendiciones vienen por el Amor de Dios...

Hágase un favor: Que su integridad quede sin un rasguño cuando el Diablo lo despoje de algo. Mire hacia el cielo y vea su nombre puesto en una placa adornando las paredes del Trono y a Dios sonriendo cuando la lee...

Comentarios

Entradas populares de este blog

LA NIÑERA Y SUS "BUENAS" INTENCIONES... (Parte 1)

DESATADLO Y DEJADLO IR. (Jn. 11:44)

PASAS Y MANZANAS