LA DIGNIDAD MATRIMONIAL

Cuando alquilaron al profeta no judío Balaam para que maldijera a Israel, el hombre pidió ir a un monte para observar las tiendas de Israel y ver si encontraba una razón para maldecirles. Lo que vio quedó registrado en la Biblia: "Cuán buenas son tus tiendas, oh Yaakov, tus moradas, oh Israel".  El profeta no estaba alabando la forma de acampar de Israel ni tampoco la calidad de sus telas. Lo que estaba alabando era que las tiendas donde vivían los hebreos no tenían puertas una frente a la otra. Eso significaba privacidad. Dignidad matrimonial. Ni uno ni otro se daba cuenta de lo que sucedía entre las cuatro paredes de sus tiendas. Todo era privado. Todo...

Hoy, hay un profeta que también se ha ocupado por buscar una manera de traer maldición a los matrimonios y hogares cristianos... Se llama Facebook. Y éste sì ha encontrado puertas y ventanas abiertas... Es un fisgón por excelencia...

Podemos ver como esposos se toman fotos semi desnudos en sus camas, esposas frente a los espejos fotografiàndose semi desnudas para mostrarle al mundo a través de su pàgina el cuerpo que tienen. Los hijos no se están quedando atrás  Niñas aún sin desarrollar mostrando en esa ventana cómo son en la intimidad. 

Las puertas de muchas casas están siendo abiertas a la comunidad. Mientras más "seguidores" tenga alguien en su Twitter o Facebook, mucho mejor. Hoy los matrimonios no tienen ningún pudor en mostrar las debilidades de sus parejas o hijos. Los avergüenzan impunemente ante sus seguidores y se rebajan a un nivel animalezco, dandole gusto a sus deseos hedonistas y vulgares con tal de alimentar a sus 43,000 "seguidores"... Esposos siendo fotografiados por sus esposas en la bañera para luego subir esas fotos a su ventana pública.  Ellos, a su vez, tomàndole fotos a su esposa recién levantada, sin maquillarse y despeinada para que la vean en "son de broma" todos sus 43,000 "seguidores"...

Hemos olvidado que nuestro hogar y nuestra familia son algo especial, algo que debemos resguardar y preservar. Hemos dejado de notar que algo preciado se ha perdido con cada nueva invasión a nuestra privacidad. ¿Cómo podemos preservar nuestro matrimonio si estamos dispuestos a contarle a todos esos extraños sobre nuestros conflictos internos? Sin mencionar el hecho de que en la conciencia bíblica  avergonzar a alguien en público es equivalente a matarlo. ¿Cómo podemos mantener una relación saludable con nuestros hijos si revelamos sus debilidades para que el mundo entero las vea? ¿Y cómo podremos los padres mantener el respeto que nuestros hijos nos deben si les permitimos que nos avergüencen ante sus amistades?

Y lo más importante, ¿cómo podemos mantener nuestro propio sentido de dignidad si todas nuestras experiencias de vida, todos nuestros pensamientos y objetivos más íntimos junto con cada impulso momentáneo son expresados en nuestra pagina de Facebook? Facebook parece tener la sospechosa distinción de convertir al exhibicionismo y al voyerismo en algo socialmente aceptable.

No deberíamos escribir un post o un tweet sobre nuestros matrimonios. Eso simplemente vulgariza y desvalora esta santa institución. Avergüenza a nuestras parejas. Y no deberíamos escribir un post o un tweet sobre nosotros mismos. Deberíamos tener demasiada dignidad y autoestima como para invadir nuestra propia privacidad de esa forma. Si realmente pudiéramos ejercitar y promover este nivel de restricción, cambiaríamos la sociedad. 

Nuestros ancestros sabían cómo vivir. Necesitamos buenas tiendas y viviendas, no solamente como albergue, sino para preservar nuestra humanidad esencial y nuestra visión de nosotros mismos.

Entonces... ¿Què opina ahora de "subir" su información privada al público? ¿Glorifica eso al Señor?