CAMBIEMOS LA HISTORIA...

El 12 de este mes escribí algo sobre el nacimiento de Jesús. Hablé de la poca visión del mesonero al negarles, según la Escritura, un lugar cómodo a José y María para que naciera el Niño.

Concluí pensando que lo mismo hacen con nosotros, sus herederos. Nos ven de menos. Nos menosprecian y nos ponen en el último lugar de la cadena alimenticia. Si no me cree, vaya a un banco y pida un préstamo sin más recomendación que su Biblia. Fruncirán el ceño y lo sentarán en una silla de espera para eterna memoria... O vaya a pedir visa para ir a ver a sus familiares del otro lado de la frontera. De seguro que le dirán la consabida frase "usted no aplica para que le demos visa".

Ahora quiero darle vuelta a la historia...

¿Y si José y María hubieran llegado envueltos en pieles, en una limusina, rodeados de oropeles y con los honores de un jefe de estado? ¿Y si Dios hubiera adornado Belen como Hollywood la noche de entrega de los Premios Óscares, con alfombra roja, luces deslumbrantes y entrevistas de los ángeles a la pareja real? "¡María, María, estás divina!" Y José posando con su mejor sonrisa...

Si Jesús hubiera venido con bombos y platillos, habríamos leído la historia de diferente manera. El mesonero les hubiera dado su propia habitación (si es que tuviera una el muy ingrato) y les hubiera puesto lo mejor de lo mejor... Claro, se trataba de la pareja que iba a traer al mundo al Rey de reyes...

¿No es así como nos debieran tratar a nosotros? ¿Quién vive en un mundo de fantasía? ¿O siempre de vacaciones? Ni usted ni yo. Nosotros tenemos vidas comunes y corrientes. Hay que pagar las cuentas, tender las camas y hacer los mandados. Con seguridad nunca apareceremos en la portada de una revista, ni esperamos una llamada de la Presidencia... Felicitaciones. Calificamos para una historia de Navidad contemporánea... Dios entró al mundo a través de gente como usted y como yo...

Pero no se desespere. Quizá hasta hoy le han negado la visa para entrar al país del norte. Pero llegará el día en que desearán tenerlo entre ellos. Cuando se den cuenta que usted es la bendición para ellos. Cuando se les abran los ojos y vean que han desperdiciado mucho tiempo negándole la entrada a sus calles y avenidas...

El Verbo, la Palabra de Dios entró al mundo con el llanto de un bebé. Su familia no tenía dinero en efectivo, tarjeta de crédito, contactos ni manera de ejercer presión. Jesús, el Hacedor del universo, el que inventó el tiempo y creó el aire que respiramos, nació en una familia tan humilde que ni siquiera pudo conseguir una cama para una madre próxima a dar a luz...

Entonces, repito el final de mi escrito el 12 de este mes... ¿Qué nos extraña que tengamos que hacer cola hasta para pagar el súper...? Llegará el tiempo en que se cumplirá lo ofrecido... "Serás cabeza y no cola. Estarás arriba y nunca abajo. Estarás adelante y no atrás. Nunca pedirás prestado, pero tú le darás a los que te pidan". ¿No será hermoso? Solo esperemos. Yo estoy esperando también, no se aflija...

Para ese día sí cambiará la historia...


Comentarios

Entradas populares de este blog

LA NIÑERA Y SUS "BUENAS" INTENCIONES... (Parte 1)

DESATADLO Y DEJADLO IR. (Jn. 11:44)

PASAS Y MANZANAS