¿QUIEN ES SABIO...?
El que mira hacia el futuro...
La mayoría de evangélicos (no cristianos) sufren de miopía espiritual. Lo digo porque, durante mis varios años de estar en el evangelio he visto a tantas y tantas personas abandonar sus congregaciones porque algo que se predicó y tocó una llaga no les gustó y la abandonaron.
No se dan cuenta que el Médico de médicos que es Jesucristo, lo que hizo fue tocar un punto de dolor. Y ese dolor le servirá para trabajar con ese paciente. Pero el paciente abandona la sala... y se aleja llevándose su mal... sin sanarse. Eso es miopía. Es no ver hacia el futuro. Se alejan de su congregación y se van a otra y no se dan cuenta que ponen en peligro a sus hijos, su familia y, muchas veces, su propio hogar.
No estoy hablando de que no dejen al Señor. Eso es diferente. Dejar al Señor es abandonar totalmente su relación con Él. Estoy hablando de los que, al escuchar una palabra que toca un punto sensible de su alma inmediatamente toman la decisión de irse de esa congregación y buscan otra en donde no les prediquen lo que necesitan escuchar... quieren oír lo que quieren oír... no lo que deben oír.
Eso es falta de sabiduría. La Biblia dice "Corrige al sabio y te amará". Esto nos enseña que cuando hay alguien sabio en la congregación y se predica un mensaje de restauración, aunque duela lo que se está escuchando, se tomará esa palabra como una medicina. Eso es sabiduría. El sabio es el que aunque le duela, sabe que lo están sanando, que están tratando alguna herida del pasado y se mantiene en ese lugar aunque cada domingo le hablen de lo que está sufriendo. Hasta que queda sano. Eso es sabiduría...
Pero también dice la Biblia: "Corrige al necio y te odiará". Los necios son los que, cuando se predica una palabra que les lastima, juzgan mal al pastor, al predicador y se van de la congregación con su tumor, con su cáncer espiritual y, lo peor de todo, es que se van a contaminar a otros con sus males. Pobres necios. No aprecian lo que la Palabra, El Logos, Jesús, quieren hacer con su vida. No saben que están menospreciando la sanidad de sus almas, no saben que son hijos que necesitan ser corregidos. ¿No dice la Biblia que el Señor al que toma por hijo lo corrige? Sin embargo, el amor a uno mismo les hace abandonar la Casa del Padre y se van buscando otros lugares en donde no se les corrija, donde no se les instruya y lleguen a ser verdaderos cristianos y no solo evangélicos. Por eso en mi introducción puse entre paréntesis (no cristianos), porque no es lo mismo ser cristianos que evangélicos. Los cristianos son discípulos de Cristo, son seguidores de Cristo, son obedientes a Cristo. Los evangélicos son los que tienen en sus biblias cinco evangelios: El evangelio según Mateo, Marcos, Lucas, Juan... y el evangelio según YO...
Raro... ¿verdad? Creo que se necesita mucha madurez cristiana para saber que cuando el mensaje que se predica toca llagas es porque éstas existen. De otra manera no dolería lo que se está predicando. No culpen al predicador... cúlpese usted si es su caso y no abandone la clínica. Cuando le tocan la llaga y usted brinca de dolor... lo están empezando a sanar. Quédese y aguántese, muy pronto pasará todo y usted verá grandes resultados en su vida c r i s t i a n a...
Gracias por este mensaje, la verdad es que necesito cambiar muchas areas de mi vida y a veces el dolor de nuestras llagas hace que no visualicemos la sanidad que produce limpiarlar aunque eso requiera de restregar de quitar lo que infecta el corazon, es duro, a veces como niños da miedo ir a la clinica, saber que te pondran esa inyeccion que traspasa la piel, que te tocaran esa herida, esas areas de mal olor por guardar tanto odio y resentimiento y se hace lo posible porque no lo toquen lo que duele
ResponderEliminar.pero que pronto ese dolor traera salud, asi es la Palabra de Dios nos inyecta su instruccion, para que nuestra vida sea restaurada y fortalecida. Gracias Pastor por esas dosis, a veces amargas, a veces un poco dulces pero que recibo con amor porque se que es para mi sanidad. Gracias Señor por tus mensajes