"LOS FEOS" QUE SOLO DIOS AMÓ... (2)

Continuando con el asunto de los "feos" que todos evitan porque inspiran miedo, terror y desconfianza, ahora quiero hablar de otros "feos" que andamos por allí...
 
Solo que estos "feos" sí usan camisas y de marca. Relojes finos. Anillos lujosos. Se mueven no a pie y descalzos, sino en camionetas de lujo. No viven en la Tutunichapa sino en colonias de lujo. No inhalan pegamento ni solvente de pinturas para matar el hambre pero inhalan otras cosas para matar su sed de sexo y perversión. Estos "feos" son los que andan en las calles de saco y corbata. Se rasuran todos los días, se hacen el manicure, pedicure y tratamientos faciales. No huelen a basura sino a lociones caras y finas. Aunque sus corazones apestan a hipocresía y maldad. Son los "feos" vestidos con ropas finas. Es más... no se nota que sean "feos"...
 
Solo Jesús sabe lo que son. O, mejor dicho... lo que somos...
 
Porque estos "feos" que nadie los ve tal como son, están en las oficinas de gobierno y sobornan a las secretarias necesitadas de su trabajo para conseguir "favores" especiales y que si se los niegan, las amenazan con despedirlas y dejarles sus mesas sin pan y sin leche para sus hijos...
 
Son los pastores que se enseñorean de las ovejas de Jesús y se adueñan de sus vidas, creyéndose pequeños reyes omnipotentes que pueden acostarse con cualquier mujer que tengan a mano... y que si se niegan, las maldicen y las envían al infierno...
 
Son las elegantes y adornadas damas de alcurnia que no le cancelan su sueldo a la empleada que ha trabajado treinta días en sus casas, abandonando por necesidad a sus hijos y recomendándolos con alguna vecina mientras ella sale a buscar un salario que le permita llevar pan a su casa...
 
Son los buseros que no respetan la vida de los usuarios del transporte público. Son los empleados bancarios que no les importa que la gente haga largas esperas en sus ventanillas bajo el sol o la lluvia mientras ellos trabajan con su habitual parsimonia...
 
Son los elegantes y guapos depredadores sexuales que están al acecho de su siguiente víctima. Son los patrones corruptos que en vez de salario le dan a sus empleados aguardiente y droga para que no cobren lo que merecen por su trabajo...
 
También por todos nosotros, los otros "feos" Jesús llegó a las playas de nuestra Gadara a rescatarnos. Porque solo Él sabía lo necesitados que estábamos de un cambio. De una transformación. De un rescate. Y solo Él, que conoce lo íntimo del corazón humano se atrevió a llegar hasta el estercolero donde estábamos sumergidos creyendo que la educación, los títulos y diplomas que cuelgan en las paredes de muchas oficinas disfrazaban lo que realmente éramos...
 
¿Acaso no fue eso lo que escribió el Escritor Sagrado?  "...lo vil del mundo escogió Dios..." Permítame entonces, parafrasear esto: ¿Donde está oh, orgullo tu victoria?
 
 

Comentarios

  1. Un gancho directo al orgullo!!!!
    Gracias por compartir estas reflexiones que nos hacen meditar dos veces y paranos en lo que realmente somos...necesitados de la gracia y misericordia de Dios.
    Bendiciones...!!!

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