¿PARA QUÉ NOS ALCANZÓ CRISTO?

... a fin de poder alcanzar aquello para lo cual también fui alcanzado por Cristo Jesús. Fil. 3:12b

 

Conocer mi identidad es muy importante. Saber quién soy y por qué estoy aquí es vital para cumplir el Propósito del Señor para mi vida. De lo contrario estoy viviendo en una penumbra. Seré anodino. Sobreviviré pero no haré nada de lo que está escrito sobre mi en el Libro de la Vida del Señor...

Pablo se llevó años y años de estudio para saber para qué fue creado. Como judío converso él tuvo que estudiar las Escrituras para conocer el por qué de la salvación. Y es que, siendo judío, tenía la certeza de que era hijo de Dios. Sin embargo, cuando se encuentra con Cristo en el camino a Damasco, todo su mundo hebreo se derrumbó. Se hizo añicos. Y decidió empezar de cero. Ya no era el Saulo de Tarso, el educado a los pies del sabio Gamaliel. Decidió que todo lo que había aprendido en la Ley judía, si bien era el instrumento para llevarlo a algo más profundo, comenzó a buscar su verdadero árbol genealógico... Y se encontró con que Gamaliel le había servido solo para introducirlo en la Verdad. Y se encontró con la Verdad. Con Cristo. De allí en adelante Saulo ya no fue Saulo. Fue mudado en otro hombre. Y le dieron otro nombre. Nació Pablo. El que encontró al fin su propósito. Ahora tenía identidad propia. No genérica. Ahora tenía un camino que caminar: el de Cristo. Ya no iba a seguir persiguiendo quimeras. Ahora iba a perseguir pecadores para llevarlo a Cristo. Ya no iba a perseguir cristianos para llevarlos a la cárcel. Ahora le habían cambiado su agenda para vivir la Agenda del Señor.

 

Y se dio cuenta de una cosa: Había sido alcanzado por Cristo para llevar el evangelio de la Gracia a todos aquellos que se cruzaran en su camino. O en la cárcel. O en un barco. O en la isla de Malta. O en el mismo Pretorio romano... ¡al fin! había alcanzado su propósito: servir al Seño en la predicación del Evangelio...

 

¿Y usted? ¿Ya sabe usted para qué fue alcanzado por Cristo?

¿Ya buscó en la Palabra el Propósito del Señor para haberle alcanzado?

¿Ya tiene claro su llamado?

¿Lo está buscando? ¿Está viviendo solo por que sí, o está buscando su derrotero?

 

Quizás no lo alcanzaron para predicar, lo acepto. Quizás no lo alcanzaron para ir a la Isla de Malta, lo acepto. Talves no lo alcanzaron para ir a Roma, también lo acepto...

 

Pero... para algo lo alcanzó Cristo. ¿No le parece? Ahora le toca a usted alcanzar lo que Cristo tiene para usted.

 

Buen viaje...